En esta soledad que vivo,
en esta austera vida momentánea,
hasta el silencio tiene sonido.
Trabajo para Ti, mi Dios,
las horas pasan...
porque así lo indica el reloj.
Absorta en la Misión que me confías,
hago un alto en el camino,
para degustar alimentos.
Mientras sigo trabajando para Ti,
escribiendo,
no puedo más que darte gracias,
por cuánto de Ti, recibo.
Maestro,
dulce Amor de mi alma.
Espíritu Santo,
fuerza que mueve mis pies.
Padre de nuestro Señor Jesucristo,
que tu Misericordia,
alcance toda a tierra. Amén
Manuela González Aguilera
en esta austera vida momentánea,
hasta el silencio tiene sonido.
Trabajo para Ti, mi Dios,
las horas pasan...
porque así lo indica el reloj.
Absorta en la Misión que me confías,
hago un alto en el camino,
para degustar alimentos.
Mientras sigo trabajando para Ti,
escribiendo,
no puedo más que darte gracias,
por cuánto de Ti, recibo.
Maestro,
dulce Amor de mi alma.
Espíritu Santo,
fuerza que mueve mis pies.
Padre de nuestro Señor Jesucristo,
que tu Misericordia,
alcance toda a tierra. Amén
Manuela González Aguilera
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.