lunes, 27 de febrero de 2012

Experiencia de fe

Lectura del libro de Isaías (55, 10-11)

Así habla el Señor: Como la lluvia y la nieve descienden del cielo y no vuelven a él sin haber empapado la tierra, sin haberla fecundado y hecho germinar, para que dé la semilla al sembrador y el pan al que come, así sucede con la palabra que sale de mi boca: ella no vuelve a mí estéril, sino que realiza todo lo que Yo quiero y cumple la misión que Yo le encomendé.
Palabra de Dios. 

 Reflexión 

 Tu Palabra Señor, toca mi corazón. Cada vez que escucho o leo este texto de Isaías, además de ser un bello poema lleno de esperanzas, me lleva a las primeras experiencias de fe, cuando aun desconocía, no solo este pasaje bíblico, si no todo, no me conocía a mí misma, ni a Ti tampoco, no sabía quién eras Tú. Por aquel tiempo, sentí en mi corazón unas palabras tan hermosas y nuevas para mi, que me di prisa en coger un lápiz para escribirlas: "Como la lluvia empapa la tierra, así Mi Gracia empapa tu corazón"

    El día que por primera vez escuché la lectura de Isaías. No salía de mi asombro, cómo podía ser posible tanta casualidad. La Palabra escuchada, tenía relación con la oración que escribí. Tu Palabra es Vida Señor, está Viva, y se hace Vida en la vida del creyente. 

    Señor, que tu Palabra en mí, no se vuelva estéril, que no llegue a tu Presencia vacía, si no que se cumpla como Tú dices, y realice todo aquello que me pidas, cumpliendo la misión que me encomiendes. Que tu Amor sea fecundo en mi corazón y de frutos abundantes, para que otros coman de los bienes recibidos, según tu voluntad. 

 Manuela González Aguilera

jueves, 23 de febrero de 2012

Hombre viejo


A veces, viene a mi recuerdo la figura del “hombre viejo”, más parecido a una “bestia” que salía de mi cuerpo, abandonándolo a regañadientes. Cómo vi esto, no lo sé, fue un momento, como un “flas”. Buscando una explicación razonable, pensé: “Me he debido quedar dormida, ha sido un sueño” Pero la verdad es que no lo sé.

Sueño o no, lo significativo de esta experiencia, es que el Encuentro con Jesús, expulsó el mal que habitaba en mi interior, haciéndome infeliz y sembrando infelicidad a mi alrededor.

Jesús, soltó amarras, cortó las cadenas que llevaba arrastrando años... me hizo libre para Amar, invitándome a comunicar la Buena Noticia…

Me hizo grandes regalos:
    La vida en su Vida, para gozarla.
    Su Paz, para sembrarla.
    Su Amor, para donarlo.
    Su Alegría, para compartirla.
    El Don de la Eucaristía, para fortalecerme en el camino.
            La Palabra, como Luz y alimento espiritual.
    La oración escrita, para compartir la Grandeza de su Amor al mundo y las maravillas que hace...

Eternamente estaré agradecida al Señor, por cuánto ha enriquecido tan pobre vida.

Manuela González Aguilera

Unos momentos Jesús

Unos momentos contigo Jesús, saboreando el silencio de la noche. Hablarte quiero, de este Encuentro de jóvenes, impulsado por tu Espíritu. Son muchas las personas que te servimos, uniendo esfuerzo y trabajo, fe y esperanza. Contamos con tu ayuda, con la fuerza que nos das, a pesar de las dificultades para responder a tu llamada.

Jesús, que el Espíritu Santo, sople con fuerza sus Dones. Cubra nuestras faltas y torpezas, para que todos alcancemos la meta deseada: El Encuentro Contigo. Porque solo Tú, tienes poder para transformar nuestras vidas, las vidas de tantos jóvenes desilusionados, por un mundo que les ofrece ídolos vanos, valores erróneos, estructuras fracasadas.

Solo Tú, eres el motor que pone en marcha la vida cristiana, dando fuerzas para superar lo inimaginable. Solo Tú, eres fuente de alegría y felicidad. Solo en Ti, encontramos la Paz tan deseada y el Amor que verdaderamente necesita nuestras almas. El Amor que merece ser, el más Amado, el Amor más deseado.

Nadie como Tú, ordena nuestras vidas, sana nuestras mentes, curas nuestras heridas. Nos muestras el camino del perdón, mirando tu divina Misericordia, para con nosotros.

Nos enseña Sabiduría, para vivir y gozar la vida. Nos enseñas a servir y a Amar sirviendo. A ser amigos unos de otros en Ti, solo Tú, despiertas al que duerme. “Resucita” al que vive “muerto en vida”. Levanta al caído y dignifica a la persona, elevándola hacia Ti.

       Quien tiene la dicha de encontrarse contigo, ya no podrá, ni querrá separarse de Ti, jamás podrá olvidar la experiencia del primer Encuentro, del Amor primero. Seguirá tras de Ti, siguiendo tus huellas, como discípulo Amado, al servicio de quien le ha salvado de sí mismo y del mundo; para servirle en el mundo, comunicando la Buena Noticia, que eres Tú, mi Amado Jesús. Para que también otros gocen, la dicha de sentirse salvados por Ti.

Tu campo es grande Señor y necesita sembradores, para esparcir la semilla de tu Reino por toda la Tierra; para que llegue tu salvación a toda criatura. Pero antes, han de encontrarse contigo, sentirse seducidos por Ti, enamorarse de tu Amor, de tu Obra, de tu Persona, del Evangelio. De la salvación, que nos regalas, como Don de Dios al hombre, por puro Amor, solo Amor, ese Amor, que es locura para muchos, Vida de Gracia, para otros.

Escucha Señor, esta humilde oración, hecha por Amor a Jesús y las cosas que el Ama. En tu Presencia, pido por este Encuentro de jóvenes, impulsado por tu Espíritu, para que sea fructífero y positivo para sus vidas y las vidas de otros muchos jóvenes. Amén.

Manuela González Aguilera 






Abrazando la vida


Mis pensamientos y mi corazón están contigo
Mi casa, en Roca firme, 
Abrazando la vida. 
Mi alma te pertenece.
Mi corazón, Sagrario donde mora tu Amor. 
La oración, como la Luz, 
Proyecta su sombra hacia lo Alto, 
Elevándome hasta Ti. 
Me desconectas del mundo, 
Para degustar Tu Presencia amorosa. 
Tu Amor, me enamora, 
Me fortalece, me impulsa  a seguirte, 
Entregándote todo, sin nada para mi. 
Desgasto mi vida en tus cosas,
Comunicando la Buena Noticia 
Que eres Tú, Amado Jesús. 
Comparto, con los medios que dispongo, 
Los bienes espirituales que me otorgas, 
Obedeciendo tu Palabra: 
“Dad gratis, lo que gratis habéis recibido” 
Para que otros, saboreen 
La Vida Nueva que viene de Ti, 
La salvación que nos traes. 
Cómo agradecerte el bien 
Que has hecho conmigo. 
Me enseñas sabiduría, 
El arte de vivir la vida, con alegría, 
De ser feliz, aún en las contrariedades. 
Cómo no Amar al Señor, y dador de la Vida. 

Manuela González Aguilera

Oración de Misericordia

Señor, eres Justo y Misericordioso
Haz justicia con Misericordia,
En el caso Undangarín…
Fortalece a la Infanta
Protege a sus hijos,
Bajo el Manto de María,
Que no les roce,
Los errores de sus padres, ni del mundo.
Protege su inocencia con tu Divino-Amor.
Ten Misericordia de la familia.

En tu nombre Jesús,
Elevo esta oración al Padre.
Para que sea escuchada, según su voluntad.

Manuela González Aguilera